La prevención suele ser una buena fórmula para conseguir minimizar problemas futuros, por lo que siempre es recomendable en cualquier ámbito de la salud y como bien dice el dicho, prevenir antes que curar.
En los niños, la visita al dentista debe ser temprana puesto que esta puede traer consigo numerosas ventajas que a continuación detallaremos.
El principal de todos, como decimos, y además de forma general, es que la prevención beneficia en todos los aspectos a la salud bucodental. Evitar que puedan surgir enfermedades o problemas bucodentales derivados es algo que se puede evitar.
Algunas de las ventajas son las siguientes:
- Como es lógico, de existir un problema, podrás detectar a tiempo cuál es y cómo afrontarlo correctamente .
- Se acorta el tiempo de tratamiento de ortodoncia para el niño.
- Detectarlo a tiempo conlleva acabar con el riesgo de que el problema crezca en gravedad, pudiendo llegar a convertirse en un problema serio o más grande del que había inicialmente.
- Mejor estética gracias a una dentadura perfecta.
- Se reduce la probabilidad de extracción de piezas dentales.
- La mejora de la colocación de la dentadura hace más fácil su limpieza, por lo que la favorece.