En términos generales los dientes que están presentes al nacer pueden provocar diferentes traumatismos o una irritación en la parte interna de la boca del bebé. Y no sólo son estas las complicaciones que pueden suceder, por ello en el post de hoy te las contamos:
- Los bebés que presentan dientes pueden llegar a lastimar a la madre en la etapa de la lactancia generando daños en el pecho.
- En casos más extraños puede suceder que los dientes terminen desprendiéndose y el niño termine tragándolos sin darse cuenta.
- Los dientes natales tienen que ser controlados de manera frecuente por el odontopediatra realizando un seguimiento minucioso de la boca del pequeño para evitar todo tipo de complicaciones. Al estar con el profesional se realizará un control de su boca y se descartarán otro tipo de anomalías congénitas, como el paladar hendido u otros problemas que pueden generar una alteración en el correcto desarrollo de la mandíbula.
Los dientes natales no requieren de ningún tratamiento específico, simplemente un control por el dentista. Sin embargo, si el profesional lo viese necesario existiría la posibilidad de extraer las piezas al bebé, ya que no se encuentran adheridas.